El domingo, Kylian Mbappé, estrella de la selección francesa de fútbol y representante en la Eurocopa 2024. dijo estar "en contra de los extremos y de las ideas divisorias" e instó a los jóvenes a votar en un "momento crucial" de la historia francesa.
Los comentarios de provocaron una corriente de controversia, y figuras de la derecha le advirtieron que no interfiriera en la política. La selección masculina de fútbol de Francia ha sido vista durante mucho tiempo como un modelo de diversidad en el país.
Varias docenas de personalidades deportivas francesas han expresado su apoyo al liberalismo mientras las encuestas iniciales sugieren que el partido de extrema derecha Agrupación Nacional podría obtener el mayor número de votos en las próximas elecciones.
Las primeras encuestas sitúan a RN a la cabeza con más del 30%, mientras que el grupo presidencial de Emmanuel Macron ocupa el tercer lugar. El corto plazo para la campaña está ejerciendo presión sobre todos los partidos.
Los candidatos tenían hasta el domingo por la tarde para inscribirse para los 577 escaños de la Asamblea Nacional, que se disputarán en la primera vuelta de las elecciones parlamentarias el 30 de junio, con la decisiva segunda vuelta el 7 de julio.
Macron ha descartado renunciar independientemente del resultado final, aunque probablemente perderá su control sobre la nación. Las elecciones anticipadas también ponen en juego la estabilidad del mercado de valores de Francia y del euro.
Los activos europeos se desplomaron en su mayoría después de que las ganancias de la extrema derecha lograran inesperadamente avances significativos en las recientes elecciones parlamentarias europeas, en parte debido al aumento de los precios y la crisis fronteriza.
Venta masiva de activos franceses
Según una encuesta de administradores de fondos realizada por BofA, los inversores eran más propensos a esperar que las acciones francesas cayeran durante los próximos 12 meses en comparación con cualquier otra acción en todo el continente.
Se trata de un cambio brusco con respecto a mayo, cuando los inversores consideraban que las acciones de los mercados franceses eran su principal opción y el CAC 40 alcanzaba niveles récord. La semana pasada, el índice registró su peor desempeño desde marzo de 2022.
Junto con una venta masiva de acciones, los costos de endeudamiento aumentaron y el diferencial entre los rendimientos de los bonos franceses y alemanes a 10 años se amplió en 25 puntos básicos. Se espera que esa tendencia continúe en las próximas semanas.
Es probable que las acciones francesas sufran un nuevo golpe por el riesgo político en las próximas semanas y meses, pero según los estrategas de Goldman Sachs, el impacto se centrará principalmente en ciertas áreas.
Advirtieron que las acciones nacionales son particularmente vulnerables y recomendaron sectores defensivos como el de atención médica para cubrir la incertidumbre política en el corto plazo.
Sin embargo, el banco argumentó que el partido de Le Pen podría resultar más favorable a las empresas de lo esperado a largo plazo si sigue centrado en asegurar la victoria de un candidato en las elecciones presidenciales de 2027.
Desde una perspectiva más amplia, una mayor percepción de riesgo político en Europa mantendrá la brecha de valoración de la región con Estados Unidos, aunque el CAC 40 en su conjunto sólo tiene alrededor del 20% de exposición francesa.
Volver al primer puesto
Los datos muestran que el principal mercado de valores del Reino Unido recuperó su corona como el más valioso de Europa por primera vez en casi dos años. El valor total de las empresas que cotizan en la Bolsa de Valores de Londres ha superado el de París.
Las valoraciones siguen cercanas, pero los analistas califican la recuperación del Reino Unido como un hito. Después de varios años de bajo rendimiento, el mercado británico está resurgiendo, mientras que en Francia emerge el malestar.
Los analistas atribuyen el pobre desempeño anterior de la LSE a las consecuencias del minipresupuesto de la ex primera ministra Liz Truss, una libra débil, temores de recesión y los efectos del Brexit.
Tanto el Partido Laborista como el Partido Conservador han estado intentando convencer a los inversores de sus enfoques hacia las empresas. El canciller Jeremy Hunt señaló el mes pasado que el mercado del Reino Unido ha sido subestimado.
Rolls-Royce lideró las ganancias del FTSE 100 este año, con un aumento del 56% impulsado por el auge en los viajes y el transportedespués de la pandemia. Las acciones bancarias en el índice también subieron, beneficiándose de las tasas de interés más largas.
St James's Place señaló que el descuento entre las acciones del Reino Unido y sus pares estadounidenses ha oscilado históricamente entre el 15% y el 25%, pero ahora se sitúa entre el 45% y el 50%.
A pesar del repunte, los inversores continúan sacando capital del mercado británico. En mayo, los fondos de acciones del Reino Unido experimentaron su 36º mes consecutivo de salidas de capital, lo que representa tres años ininterrumpidos de fuga de efectivo del mercado de valores del Reino Unido.
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