La libra esterlina se encaminó a su racha más larga de pérdidas frente a la moneda única este año después de que el gobernador del BOE dijera que no era necesario que la inflación volviera a su objetivo para justificar los recortes de tipos.
Pero Andrew Bailey subrayó que había "señales alentadoras" en los indicadores clave del mercado laboral y los precios de los servicios. En una reunión a principios de este mes, el banco central abandonó su orientación agresiva.
Los mercados de futuros muestran que los operadores esperan alrededor de tres recortes de tipos por parte del BOE este año, en comparación con al menos cuatro del BCE. Sin embargo, los responsables de las políticas a lo largo del Canal de la Mancha aún no se han convencido de la disminución de los riesgos inflacionarios.
Los especuladores elevaron su posición alcista de la libra esterlina a un nivel apenas por debajo del máximo de nueve años alcanzado en julio pasado en la semana hasta el 13 de febrero, según la CFTC. Los fondos apalancados realizan ahora su mayor apuesta por una libra en alza desde octubre.
Las reversiones de riesgo de tres meses en el EURGBP cayeron a su nivel más bajo desde marzo de 2022, una señal de la voluntad de los operadores de pagar una prima mayor por opciones con ejercicios más bajos.
Durante los últimos meses, el atractivo de mayores rendimientos resultó ser irresistible, empujando a la libra al alza. En cuanto a la economía, las ventas minoristas experimentaron en enero su mayor aumento mensual desde abril de 2021, luego de una caída el mes anterior.
Riesgo de ajuste excesivo
El banco central corre el riesgo de profundizar la recesión si no recurre pronto a recortes de las tasas de interés, advirtió su ex economista jefe Andy Haldane. Era una de sus voces más críticas en el MPC.
"Para mí, los argumentos para implementar algún seguro anticipado y temprano en el lado de la política monetaria son sólidos y se están fortaleciendo. Temo que dejemos ese seguro demasiado tarde en el año", dijo.
Swati Dhingra, quien fija las tasas, señaló que la inflación ya está en una “senda firme descendente” y que los precios de los servicios no son una buena medida de la inflación generada internamente. En la última reunión de política monetaria, votó a favor de un recorte de tipos.
"En mi opinión, la evidencia para pecar de un ajuste excesivo no es convincente, ya que a menudo conlleva aterrizajes bruscos y cicatrices en la capacidad de oferta, lo que pesaría aún más en los niveles de vida".
La economía del Reino Unido creció solo un 0,1% en 2023, menos que el 2,5% de Estados Unidos y el 0,5% de la eurozona. A principios de este mes, el BOE ha mejorado su previsión de crecimiento para 2024 de cero a 0,25%.
El primer ministro Sunak no ha cumplido, especialmente si se tiene en cuenta la población. La producción per cápita se contrajo un 0,7% en 2023, cayendo en todos los trimestres del año pasado y sin crecer desde principios de 2022.
Es posible que el BCE también se haya equivocado al aplicar un ajuste excesivo: una bendición para la libra. La Comisión Europea rebajó sus previsiones de crecimiento de la UE y la eurozona para 2024 al 0,8% la semana pasada.
Apuestas multitudinarias
BofA se ha vuelto optimista respecto de la libra esterlina y la semana pasada aumentó su objetivo para fin de año para la libra a 1,37 dólares. Esto es contrario a su visión de hace menos de dos años de una crisis “existencial” de la libra esterlina.
El banco predice que estará entre las principales monedas con mejor desempeño en 2024 y que el EURGBP se debilitará a 0,84 este año. Hasta ahora, la libra ha ganado frente a todos sus pares del G10 excepto el dólar.
"El Reino Unido se ha convertido en una especie de punto de referencia bajo para todos los demás miembros del G10 con todos los problemas que tuvo que afrontar la economía en 2023", dijo Valentin Marinov, especialista en estrategia monetaria de Credit Agricole, "A pesar de eso, los datos no han sido todo terrible”.
Marinov pronostica que la libra se fortalecerá hasta 0,83 frente al euro. Mientras que la opinión de MUFG Bank era vender el euro para comprar la libra a finales del mes pasado con una opción de compra de 0,8275.
El FMI declaró hace meses que el reino sería la economía de crecimiento más lento entre las naciones del G7, pero la fragilidad de Alemania pone en duda si la economía de la eurozona podrá superar el dilema energético y la desaceleración de China.
El PMI preliminar del S&P Global/CIPS del Reino Unido de febrero subió a 53,3, el más alto en nueve meses, impulsado por un sólido sector de servicios, que superó cifras comparables de la eurozona y Estados Unidos.
Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global Market Intelligence, dijo que la encuesta apuntaba a que la economía crecería un 0,2% o un 0,3% en el primer trimestre. Pero advirtió que la inflación podría quedarse estancada en el actual 4%.
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