El Dow alcanzó su cuarto cierre récord en cinco sesiones el jueves, impulsado por las fuertes ventas minoristas y el pronóstico positivo de TSMC.
El Dow avanzó el jueves a su cuarto cierre récord en las últimas cinco sesiones gracias a unas ventas minoristas mensuales más fuertes de lo esperado y al pronóstico optimista de TSMC.
La semana pasada, las acciones de los bancos estadounidenses alcanzaron su nivel más alto desde antes del colapso de SVB, ya que las ganancias mejores de lo esperado de JPMorgan Chase y Wells Fargo impulsaron las esperanzas de un “aterrizaje suave” económico en el país.
Otros gigantes de Wall Street que revelaron sus resultados más tarde también sorprendieron al alza, entre ellos Morgan Stanley, Goldman Sachs y BofA. El sólido desempeño allanó el camino para que el Dow y el S&P 500 tengan un desempeño superior.
Las acciones de chips mantuvieron su ritmo y Nvidia siguió siendo la segunda compañía más valiosa de Wall Street, aunque algunos participantes del mercado han cuestionado la resistencia a largo plazo del auge.
Alphabet, Microsoft, Amazon y Meta han indicado que seguirán gastando grandes sumas en infraestructura de IA durante el próximo año, en beneficio de las empresas de hardware de IA.
Mientras que el software de IA se ofrece normalmente mediante suscripción, el hardware es una venta única. Los analistas advirtieron que las acciones de chips de IA están en una burbuja que acabará estallando una vez que el gasto de las grandes tecnológicas disminuya.
Los indicadores técnicos indican que el Dow tiene mucho camino por recorrer y no hay obstáculos a la vista. El sesgo a corto plazo seguirá siendo alcista si el índice se mantiene por encima de la media móvil simple (SMA) de 10 días.
Descargo de responsabilidad: Este material es solo para fines de información general y no pretende ser (y no debe considerarse) asesoramiento financiero, de inversión o de otro tipo en el que se deba confiar. Ninguna opinión expresada en el material constituye una recomendación por parte de EBC o del autor de que una inversión, un valor, una transacción o una estrategia de inversión en particular sea adecuada para una persona específica.