El dólar australiano siguió debilitándose con una caída de 4,5% frente al dólar estadounidense debido a las incertidumbres económicas globales.
El miércoles, el dólar australiano mostró debilidad frente al dólar estadounidense. Este año, la moneda oceánica ha experimentado una caída aproximada del 4.5% debido a las incertidumbres económicas globales.
La economía australiana registró su ritmo de crecimiento más lento en un año y medio durante el cuarto trimestre, con los altos precios y el incremento de las tasas de interés frenando el gasto del consumidor. Las condiciones financieras actuales sugieren que esta tendencia puede continuar.
Las actas recientes de la reunión indican un posible ajuste del RBA hacia una postura neutral. El banco central destacó que el balance de riesgos para las perspectivas económicas es "un poco más equilibrado" que antes.
La preocupación sobre la recuperación económica de Australia se ve agravada por la caída de los precios del mineral de hierro a su nivel más bajo en diez meses. Las reservas mantenidas en los puertos chinos alcanzan su máximo en más de un año, lo que indica un exceso de oferta.
La Asociación China del Hierro y el Acero advirtió la semana pasada que tanto la crisis inmobiliaria como la infraestructura débil están obstaculizando la demanda de acero. Además, el CRIC señaló que el mercado de viviendas nuevas podría no reactivarse rápidamente.
El PMI de la industria siderúrgica china cayó en marzo a 44.2 puntos, su nivel más bajo desde mayo del año anterior. Sin embargo, la actividad manufacturera superó las expectativas y rompió una contracción de cinco meses.
Actualmente, el dólar australiano se encuentra cerca de su mínimo del 5 de marzo, situado en 0.6477. El patrón de “cruz muerta” en los gráficos refleja un fuerte impulso bajista. Si se produce una ruptura por debajo de este nivel, se pondrá a prueba el mínimo anual cercano a 0.6440.
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