Las acciones europeas cayeron porque los inversores se mostraron cautelosos de ganancias y la próxima reunión de la Fed se sumó a la incertidumbre.
Las acciones europeas cerraron ligeramente a la baja el lunes debido a que los inversores se mantuvieron reacios al riesgo al comienzo de una semana repleta de resultados, mientras que los eventos de riesgo global como la próxima reunión de política monetaria de la Reserva Federal se sumaron a la cautela del mercado.
El índice británico FTSE 100 cerró con una leve alza, impulsado por las acciones inmobiliarias y el optimismo en torno a los recortes de las tasas de interés en el Reino Unido. El Banco de Inglaterra anunciará su decisión después de la decisión de la Reserva Federal en la semana.
Los fondos de cobertura globales abandonaron las apuestas contra los mercados bursátiles europeos al ritmo más rápido en 10 años en medio de una serie de resultados empresariales mejores de lo esperado, según una nota de Goldman Sachs a los clientes.
Europa fue la región que registró la mayor parte de las compras netas, ya que esos fondos, que en su mayoría habían sido bajistas en el mercado de bajo rendimiento, cerraron sus posiciones cortas al doble del ritmo con el que cerraron sus posiciones largas.
Un análisis reciente de Reuters de las 60 principales empresas del STOXX 600 mostró que cuando las empresas europeas informaron sus ganancias durante el año pasado, sus movimientos diarios promedio de acciones fueron un 18% más altos que hace ocho años.
Pero las preocupaciones por China siguen pesando sobre las ganancias de las empresas europeas, ya que el esperado tercer pleno no logró impresionar a los inversores con estímulos y planes de acción, según RBC Brewin Dolphin.
El FTSE 100 se ha mantenido por encima de su media móvil simple (SMA) de 50 días, pero se ha quedado atascado en el rango de cotización formado desde finales de mayo. Por ello, el camino de menor resistencia en este momento es hacia abajo.
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